– Las empresas que forman la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (Fedifar) recaudaron fondos para apoyar programas que Cáritas Española desarrolla en este ámbito
Oviedo, 26 de noviembre de 2019. El proceso de envejecimiento de la población está cambiando el dibujo de la pirámide poblacional en España, una realidad que acarrea nuevos retos, como abordar los problemas de soledad, objetiva y subjetiva, que repercuten de forma negativa en la satisfacción de necesidades vitales de nuestros mayores: salud, relación con su entorno, acceso a los servicios comunitarios, seguridad, nutrición, calidad de vida en general… Con el objetivo de ayudar a paliar este problema, las empresas de distribución farmacéutica de gama completa, a través de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (FEDIFAR), han desarrollado durante el segundo semestre del año una acción solidaria en el marco de la campaña ‘Distribución farmacéutica: 365 días solidarios’, que tiene como objetivo la mejora de la calidad de vida de personas mayores en situación de precariedad social y dependencia funcional mediante el apoyo a proyectos del programa de acompañamiento en sus domicilios puestos en marcha por Cáritas.
Durante la presentación en la sede de Cáritas en Asturias de la acción solidaria desarrollada en el segundo semestre del año por las empresas de distribución farmacéutica bajo el título ‘Atención Domiciliaria a mayores, Distribución Farmacéutica y Cáritas’, Eladio González Miñor, presidente de FEDIFAR, mostró su satisfacción por la implicación de los mayoristas farmacéuticos en la misma. “Somos conscientes de las necesidades que tienen muchas personas mayores en situación de precariedad social y dependencia funcional que viven solas en sus hogares; por ello, es un orgullo apoyar los proyectos de acompañamiento domiciliario de Cáritas Española, con los que se trata de paliar, desde el apoyo emocional y afectivo, situaciones de soledad y desmotivación que sufren estas personas”, afirmó.
En este sentido, el vicepresidente de Fedifar, Juan Ramón Palencia, resaltó la oportunidad que se ha dado a las empresas de distribución farmacéutica para apoyar proyectos orientados a ayudar tanto a las personas mayores dependientes sin recursos que viven solas como a las familias cuidadoras que asumen “cargas importantes de cuidados sin tiempos de respiro”. Sobre este particular, Palencia destacó que con su participación en la campaña se pretende facilitar la vida de los mayores en situación de dependencia con escasos recursos económicos, una labor para la que Cáritas siempre tendrá a su lado a las empresas de distribución farmacéutica. “Las empresas de distribución, además de lograr que todos los ciudadanos accedan a través de todas las farmacias a todos los medicamentos que necesitan en condiciones de equidad, seguridad y calidad, también demuestran un fuerte compromiso solidario”, destacó.
Por su parte, Raquel Gil, responsable de Relación con Donantes e Instituciones de Cáritas Española expresó su reconocimiento a las empresas de distribución farmacéutica representadas en FEDIFAR “por su compromiso activo con la causa de la desigualdad y su voluntad corporativa de involucrarse, a través de las acciones desarrolladas por Cáritas, en la respuesta solidaria a los retos de la exclusión social y la desigualdad”. A este respecto, subrayó que el programa de acompañamiento domiciliario a personas mayores, “está fundamentado en un modelo de atención centrada en la persona, poseedora de la máxima dignidad posible”.
‘Atención Domiciliaria a mayores, Distribución Farmacéutica y Cáritas’ es la segunda acción correspondiente a 2019 de la campaña ‘Distribución farmacéutica: 365 días solidarios’, que en el primer semestre del año se plasmó en la iniciativa ‘Atención Residencial a mayores, Distribución Farmacéutica y Cáritas’, con la que los mayoristas farmacéuticos recaudaron fondos para colaborar y apoyar el trabajo de atención a mayores dependientes que lleva a cabo Cáritas.
Ejemplo: Proyecto N’Alcordanza
Los proyectos de acompañamiento domiciliario de Cáritas están orientados especialmente a personas mayores que están en situación de precariedad social y dependencia funcional como complemento a la atención de los Servicios Sociales públicos o de otras entidades. ¿El objetivo? Que puedan vivir dignamente en su entorno habitual en las mejores condiciones posibles, vinculando de nuevo a su comunidad a las personas mayores en situación de soledad.
Un ejemplo de las iniciativas que apoyan las empresas de distribución farmacéutica con esta acción es el Proyecto N’Alcordanza, que engloba acciones como ‘Acércate’ (participación de las personas mayores en actividades que comparten entre ellos y con los jóvenes); ‘Acompañando(nos)’ (acompañamiento y escucha a personas mayores); y ‘Envejecer ayudando a crecer’: (proyecto intergeneracional que pone en contacto a jóvenes estudiantes y personas mayores que viven en centros residenciales).
Se trata de actividades que van desde el seguimiento de su situación (a través de llamadas y visitas si no acuden al proyecto para identificar posibles necesidades, enfermedad o dificultades) hasta la orientación hacia los recursos sociales a los que tengan derecho, acompañándoles en su solicitud (teleasistencia, servicio de ayuda a domicilio, búsqueda de una empleada a nivel particular, ayudas económicas, médico…), pasando por un conocimiento de posibles situaciones de riesgo que haya que poner en conocimiento de la familia o los servicios sociales.
Las acciones, además de ser de interés y beneficiosas para los mayores, son una herramienta para atraer a las personas y una “excusa” para vincularles a la comunidad. En muchos casos las actividades son las que ofrece los recursos del entorno, y ahí, los voluntarios ofrecen acompañamiento y apoyo en el desplazamiento y en la realización de las mismas. “Esto ayuda además al acceso al ejercicio de sus derechos, teniendo en cuenta los Principios de las Naciones Unidas a favor de las personas mayores: Independencia, Autorrealización, Dignidad, Atención y Participación”, destacan desde Cáritas Diocesana de Oviedo.